Si hay algo que siempre estará presente en cualquier ámbito de la vida de las personas es la interacción social, incluso en algo que parece tan sencillo como hacer una compra es común que se pregunte a algún conocido sobre su experiencia con un producto o marca. La aceptación social es un aspecto importante en cualquier negocio como verás al entender cómo funciona el Social Commerce.
¿En qué consiste el Social Commerce?
El Social Commerce o comercio social es una forma de comercio que utiliza las redes sociales más populares como un canal más de ventas. Bajo estas estrategias no se logra aumentar el volumen de compras a través de posicionamiento y publicidad sino por recomendaciones de otros clientes, es decir, de terceros que compran productos de la marca.
Erróneamente se podría subestimar el valor de la opinión de un cliente sobre un determinado producto, pero lo cierto es que ésta es muy poderosa hoy en día. Resulta sorprendente que en la mayoría de los casos un comentario positivo por parte de cualquier comprador cierra la compra de otros, mientras que un comentario negativo o queja, los impulsa a buscar otras opciones.
Cuando se trabaja con estrategias de Social Commerce las redes sociales pueden utilizarse como plataformas de venta directa o como un medio para impulsar el usuario hacia la tienda virtual.
¿Cómo funciona el comercio social?
En el comercio social el producto o servicio se compra después de atravesar una red de comunicación entre compradores, así que es importante cuidar las recomendaciones, la reputación digital, los embajadores de marca y los brand lovers, que son consumidores que han desarrollado una conexión emocional con una determinada marca.
Las redes sociales que normalmente se utilizan para aprovechar las ventajas del social commerce son aquellas que pueden generar un impacto visual en el usuario y que además facilitan compartir contenido, comentar y señalar preferencias, es decir, Facebook, Instagram, Pinterest y Twitter.
Ventajas del social commerce
Las ventajas del social commerce, además de aumentar el volumen de ventas trae consigo otros beneficios como:
- Mejora el engagement en perfiles sociales, por lo que la empresa se hace más visible.
- Impulsar el tráfico en la página web, mejorar las tasas de conversión y aumentar el valor medio de los pedidos por cada usuario.
- Los usuarios crean review espontáneos sobre los servicios o productos de una marca y estos sirven de orientación para compras futuras de terceros.
- Genera mayor confianza entre la empresa, la comunidad y los clientes potenciales.
Básicamente el Social Commerce es el resultado del cruce entre el e-commerce y la comunicación a través de las redes sociales, que adquiere más valor para los usuarios al no tener únicamente fines comerciales, pues el entretenimiento y la interacción positiva con la marca hace que los seguidores se sientas más identificados y motivados a compartir su experiencia con sus conocidos.